Otras sensaciones, otras emociones, otros pensamientos; básicamente, otra semana más.

Cada día estoy más segura de que me encanta este mundo. Cada día estoy más convencida que es dónde debo estar y dónde, verdaderamente, sirvo.  La emoción que siento cuándo alguien me pide consejo o me pregunta que por qué empecé todo esto… Y sí, sé que llevo nada y que me estoy abriendo espacio poco a poco, ¿pero de eso va no? Si de verdad te gusta algo, te debe encantar desde el principio cuando no eres nadie y no tienes los medios que tanto te gustarían tener; cuando es lo más feo. Si no te hace luchar por ello, entonces, según mi opinión, no es lo tuyo. Claramente, no te va a encantar  al 100% pero lo importante es la motivación que tengas al comienzo de ese viaje hacia lo que a todo el mundo le da miedo abarcar; por el qué dirán, por el si lo conseguiré o no, por el de dónde voy a sacar tiempo… Sólo es trabajar sin que no te importe dedicarle todo el día o toda la noche, si hace falta.  Y todo lo demás son excusas que nos ponemos y que hay que saber combatir.

A fin de cuentas, no va a llegar nadie, ni un trabajo, ni nada a la puerta de tu casa si no sales fuera y lo trabajas. Nadie te regala nada a cambio de nada, y nadie te va a buscar si tú no haces ver lo valiosa/o que eres. Pero ante todo, el primero en ver ese valor debes ser tú; pues si no crees en ti primero, ¿quién lo va a hacer?

Le doy vueltas y vueltas a una maraña de posibilidades en mi cabeza. Vueltas y vueltas al cómo lo voy a conseguir. Mi pregunta es: Si los demás pueden, ¿por qué no yo?

Desde luego por mi no va a ser si no lo consigo.

Dedicación lenta y trabajosa pero con mucho feedback.

Y eso es lo importante. Sentirte realizada contigo misma.

¡Arriba!

Si te gustaría saber cómo organizarte un poco mejor la vida y los estudios o el trabajo, ¡vé este vídeo! Espero te ayude.

Cristina.